Como ha venido siendo habitual en el último tiempo, es cada vez más difícil organizar un partido de fútbol en Chile, y esta vez, el duelo entre la Universidad de Chile y la Unión Española estaría a punto de suspenderse.
¿La razón?: el cuadro hispano no puede contar con su estadio debido al cambio en la luminaria y el pasto también presenta problemas, lo que impide que se use el tradicional recinto deportivo de Independencia.
Por otro lado, la alternativa que quedaba, el Estadio Bicentenario de La Florida, pero este también fue descartado, debido a que la Municipalidad tenía agendada una actividad en el lugar para el día del partido.
Frente a esto, otra alternativa era invertir localías, para que la U utilice el Estadio Nacional, pero esto tampoco se podría, ya que el reducto de Ñuñoa se encuentra en mantenimiento, lo que impide su utilización.
En este complejo escenario, todo parece indicar que el duelo no se jugará, a menos que el club local, la Unión, logre encontrar un estadio donde se pueda jugar de acá al lunes.
El pasado te condena
Pero, esto ya había sucedido, en 2022, aunque en ese momento el equipo que actuaba de local era la Universidad de Chile, lo que fue muy criticado por la dirigencia del equipo rojo, quienes tuvieron una arremetida legal contra la U.
Ante esto, los Hispanos aprovecharon la situación y rápidamente pidieron ganar el partido por secretaría, debido a que la U no podía conseguir un reducto donde jugar y denunciaron a la Chile ante el Tribunal de Disciplina de la ANFP.
Pese a ello, la pataleta del equipo de colonias no rindió frutos, y el partido se jugó en Valparaíso, donde la Universidad de Chile derrotó a la UE por 2 a 0.
Pero esa no fue la única vez que ambos equipos tuvieron problemas, ya que, en el mismo año y en el marco de la semifinal de la Copa Chile, donde el Bulla debía actuar de local, pero ante la negativa de la Delegación de Valparaíso para usar el estadio Elías Figueroa, los azules se vieron en aprietos para conseguir un estadio.
“Hemos enviado una carta formal al Presidente de la Federación de Fútbol Chile para que se tengan en cuenta los antecedentes y se sancione como corresponda esta evidente irregularidad (…) Rechazamos de plano una posible reprogramación del partido en una nueva fecha y horario, considerando nuestro ajustado calendario”, lanzaron los dirigentes de la Unión en aquel momento.
En ese momento, la arremetida del equipo de Independencia tampoco fue aceptado y el enfrentamiento se dio en Talcahuano, con un resultado sin goles.
